Propuesta educativa de Aula Nómada
"Aprender como experiencia vital"
En Aula Nómada entendemos la educación como una experiencia viva, donde pensar, sentir y crear son actos inseparables del aprender.
Acompañamos a niños, niñas y adolescentes de 1° a 8° básico, preparándolos para rendir exámenes libres y, al mismo tiempo, para desarrollar su autonomía, creatividad, pensamiento crítico y bienestar emocional.
Nuestra propuesta nace en Magallanes y se inspira en el territorio, el arte y la naturaleza como fuentes de conocimiento. Buscamos formar personas curiosas, empáticas y conscientes, capaces de mirar el mundo con sensibilidad y propósito.
Lo que nos diferencia
Aula Nómada propone una educación que pone el foco en los procesos más que en los resultados.
Aquí, cada estudiante aprende desde su ritmo, su historia y su forma de expresarse, en un entorno acogedor y respetuoso.
Nos distingue que:
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Integramos arte, ciencia, naturaleza y pensamiento crítico como lenguajes complementarios.
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Promovemos una pedagogía del vínculo, donde la confianza y la relación humana son el centro del aprendizaje.
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Entendemos la educación desde el territorio, conectando los saberes con la vida en Magallanes.
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Trabajamos con un equipo interdisciplinario de educadores y artistas, que acompañan con sensibilidad, profesionalismo y pasión.
Fundamentos pedagógicos
Nuestra metodología integra dos enfoques que se complementan de forma natural durante la niñez y la preadolescencia, etapas marcadas por la curiosidad, la construcción de identidad y el desarrollo progresivo de la autonomía:
- Reggio Emilia: reconoce los “cien lenguajes de la infancia” y favorece la exploración, la creatividad y el pensamiento propio a través de ambientes preparados, proyectos significativos y la documentación de procesos que permite a las niñas y los niños comprender cómo aprenden.
- Lefebre Lever: pone énfasis en el vínculo, la libertad acompañada y la autorregulación emocional. Acompaña al estudiante para que pueda conocerse, expresar lo que siente y tomar decisiones cada vez más conscientes.
Ambos enfoques se encuentran en una pedagogía basada en el vínculo, la experiencia y la expresión personal. Desde esta mirada, la confianza, la autonomía y la curiosidad activa se convierten en los motores principales del aprendizaje de los 6 a los 13 años.
Nuestra metodología
En Aula Nómada aprendemos a través de proyectos interdisciplinarios que nacen de preguntas significativas, conectadas con los intereses de los estudiantes y con los fenómenos del entorno.
Cada proyecto integra los contenidos curriculares de las distintas asignaturas, Lenguaje, Matemáticas, Ciencias, Historia, Inglés y Educación Física, con las áreas artísticas y complementarias, generando experiencias de aprendizaje que tienen sentido, contexto y propósito.
Los grupos son pequeños y heterogéneos, lo que permite un acompañamiento cercano, una interacción más humana y una evaluación continua que observa el proceso más que el resultado.
A través de la evaluación formativa y reflexiva, los mediadores registran avances, fomentan la autoevaluación y ayudan a cada estudiante a reconocer su propio progreso, fortaleciendo la autonomía y la confianza.
Cada trimestre se desarrolla un proyecto troncal, que articula los objetivos de aprendizaje del nivel con un tema transversal (por ejemplo: “La energía del territorio”, “Historias que nos habitan” o “El lenguaje del movimiento”).
En paralelo, los estudiantes participan en talleres, donde exploran áreas artísticas, científicas o corporales que despiertan su curiosidad y potencian su desarrollo integral.
Esta metodología permite que los aprendizajes surjan de la experiencia, la colaboración y la reflexión, cultivando en los estudiantes no solo conocimientos, sino también habilidades para la vida: pensamiento crítico, empatía, trabajo en equipo, creatividad y autorregulación emocional.
Aprender desde el sur
Desde el extremo austral de Chile, Aula Nómada propone una educación arraigada al territorio y abierta al mundo.
Aprender aquí es también mirar el cielo, sentir el viento y descubrir el valor del lugar que habitamos.
Creemos que educar es un acto de confianza, de vínculo y de creación colectiva:
una invitación a crecer con sentido, en libertad y en comunidad.